Esta es la historia que cuentan los lugareños, que sucedió hace cientos de años, en este castillo medieval. Dicen que esta encantado, ahora les contaré el porqué....
Se decía que había sido atacado en tiempos de piratas, y que en uno de esos asaltos se había sufrido uno de los mayores robos de la historia de ese país.
Una noche de luna llena se celebraba, una gran fiesta de la realeza, ese día se presentaría a la bella princesa Valentina, hija del Rey Guillermo IV a la sociedad.
El Rey invitó a todos los reyes, reinas y príncipes casaderos de Europa, así como nobles de todos los países.
El castillo se encontraba junto al Lago Tiest, este lago conectaba con el mar y era de aguas cristalinas, el salón estaba adornado con múltiples candiles, todo lo que se encontraba ahí era muy lujoso, los invitados se quedaban sorprendidos al entrar a los jardines llenos de flores exóticas, las viandas y exquisitos manjares que se ofrecían. Los reyes y nobles estaban ataviados de pieles y joyas recamadas de piedras preciosas.
Cuando el rey Guillermo y la reina Antonieta de Muy Lejano, empezaron a dar el discurso de bienvenida, en un palco cerca al lago, se atisbó a lo lejos un barco pirata y 15 botes que venían llenos de piratas que se acercaban a los jardines, los reyes no tuvieron tiempo de avisar a la guardia real que se encontraba apostada a las puertas del castillo.
En milésimas de segundos los piratas desembarcaron en los jardines, apagaron todos los candiles y empezaron la rapiña, en la oscuridad sólo se oían los gritos de las personas desesperadas buscando ayuda.
Cuando el comandante Risp acudió al llamado de auxilio junto con la guardia real, encontraron a los invitados amordazados y algunos sin sus valiosas joyas y ropajes, al buscar en el palco a los reyes de Muy Lejano, descubrieron que la princesa Valentina había sido raptada.
Todos los que se encontraban en el castillo se encontraban muy consternados y compungidos por lo terrible de la situación, el Rey Guillermo ordenó a los altos comandantes de la marina que buscaran por todos lados a los piratas.
Pero la búsqueda fué infructífera, pasaron los meses y nunca encontraron a la princesa, era como si se la hubiera tragado Neptuno y se la hubiera llevado al fondo del mar, junto con los piratas.
Una gran pena embargaba a todo el país y se dice que la Reina se encontraba muy enferma. En el castillo se sentía la tristeza, así pasó mucho tiempo, cuando una noche de luna llena entró un mensajero a toda prisa y pidió hablar con el rey, las noticias que dió era que en el Puerto Cañaveral había una embarcación y una princesa.
Se organizó a toda la caballería que partió al puerto, con el fin de encontrar a la princesa, al preguntarle a un marinero este les dijo que estaban refugiados en una taberna. Al entrar los militares comenzó una batalla, hasta que al fin vencieron soldados, y al preguntar por la princesa, los piratas contestaron que había huido con el pirata Kevin.
Además les aclararon que ella no había sido robada, sino que había huido con Kevin, porque lo amaba, se habían conocido en una competencia de caza, en donde el había asistido por ser hijo del Conde de Nothemberg, antiguo enemigo del Guillermo IV.
Al llegar a los oídos de la Reina Antonieta, esta de dolor se murió y el Rey se sintió tan decepcionado de su hija, que decidió buscarla para encerrarla en un convento por el resto de sus días.
Estos hechos consternaron mucho a Kevin y a Valentina, y para no hacer sufrir mas a los suyos, decidieron suicidarse y jurarse amor eterno.
Por eso se dice que este castillo está encantado, cuando la luna esta llena, se ve pasear por los jardines a una bella princesa y un apuesto pirata, entrelazados los dos y mirando al cielo. Porque como dicen los lugareños, cuando es amor, si es verdadero, no es pasajero y dura hasta la eternidad.
Escrito por Daniela Carranza Saucillo
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